A partir de 2020, el consumo mundial de recursos fue solo del 8,6 % circular. Esto significa que solo el 8,6 % de los 100 000 millones de toneladas de minerales, combustibles fósiles, metales y biomasa que ingresan a la economía se reutilizan anualmente.
Esta llamada ‘brecha de circularidad’ es cada vez más grande y es el resultado de la mentalidad de economía lineal profundamente arraigada, en la que las empresas y las personas toman materiales de la tierra, los convierten en productos que a menudo tienen una vida útil corta y luego se deshacen de ellos.
Esta forma de hacer negocios es insostenible, no solo para el medio ambiente sino también para la economía. Las empresas se enfrentan a la necesidad de transformar sus procesos para alejarse del modelo lineal y adoptar prácticas de economía circular.
La presión por una economía global sostenible está creciendo en todas las facetas de los negocios. Clientes, inversores, socios, proveedores, empleados y ONG exigen que las empresas transformen su forma de trabajar para optimizar los recursos y reducir las emisiones de carbono.
Construir un modelo económico sostenible que sea más circular es una pieza clave para satisfacer esta demanda, ya que casi la mitad (45%) de las emisiones globales provienen de la fabricación de materiales y productos.
Los principios de la economía circular son esenciales, junto con las energías renovables y la eficiencia energética, para lograr un mundo con cero emisiones netas, las compañías marcan el paso de la transición y convergen mediante:
- Uso de energía inteligente, una oferta de luz como servicio mediante la cual los clientes solo pagan por la luz mientras la usan es vital en la economía circular, mientras que la empresa administra, reutiliza y recicla los productos de iluminación. A través de este enfoque innovador y circular de la iluminación, los clientes pueden lograr un desperdicio cero y reducir los costos de mantenimiento en un 60 %.
- Las compañías están abordando el problema del final de su vida útil en el espacio de la tecnología y generando valor para sus clientes al ofrecer productos remanufacturados que vienen con la misma garantía que los nuevos a un precio reducido, evitando que millones de dólares de material terminen en vertederos.
- Reciclaje, Timberland, un fabricante y minorista de calzado para actividades al aire libre, es un excelente ejemplo de innovación ecológica y el camino hacia una circularidad del 100% en el segmento de la indumentaria. La compañía ha anunciado recientemente su programa global de devolución, que permitirá a los consumidores devolver cualquier producto Timberland a una tienda para que sea reparado/restaurado o reciclado/reciclado. También dio un adelanto de su nueva línea de zapatos, diseñada específicamente para la circularidad.
- Start-ups: hay varias start-ups emergentes de economía circular que innovan en diferentes aspectos de la circularidad.
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